Aquí se
presentan en una pared blanca unos 24 cuadros de coronas de lirios de
diferentes colores, cada uno con objetos diferentes, en los cuales están varias
cintas de diferentes motivos (navideños, de ángeles, morada,…); alambre oxidados,
estaca, virgen, alambre de púas, cuerda,
cráneo de buey. Todos expuesto en su propia caja, trabajados en óleo
sobre papel para serigrafía.
Todo la obra
que indaga sóbre la estética que lo rodea el sentimiento ceremonial de lo
funerario, buscando reflejar la situación violenta del campo en donde incorpora
esos elementos propios de ese entorno en sus creaciones, como son las cuerdas,
el cráneo que son muy visibles en sus cuadros. En donde las problemáticas
sociales y la violencia del país han sido sus preocupaciones. El montaje de la
exposición que se encuentra en una galería de paredes blancas, busca sumir a
los espectadores en un estado de reflexión.
Como yo lo
interpreto, es como si cada caja fuera un ataúd, en el cual se encuentran los
elementos que lo describe, que son propios de cada uno. Todos posicionados como
un cementerio. En mi opinión la obra me
parece muy interesante, como se encuentran ubicadas y la mancha, los colores,
la composición que tiene cada pieza.